Cómo conseguir un autoconsumo industrial: 5 Claves básicas

En la actualidad, el panorama energético se encuentra en constante evolución debido a una combinación de factores, que abarcan desde la creciente demanda de electricidad hasta la preocupación por los efectos nocivos evidentes que el aumento de su consumo está suponiendo en el medio ambiente. 

La industria, como uno de los pilares fundamentales de la economía global, juega un papel crucial en esta transformación. En este contexto, la implementación de sistemas que permitan el autoconsumo eléctrico se ha convertido en una solución innovadora y beneficiosa, especialmente para el sector industrial.

De manera general, el autoconsumo industrial implica la generación y utilización de energía eléctrica en el mismo lugar donde se consume, reduciendo así la dependencia de fuentes de energía convencionales y de la red eléctrica. Esta modalidad presenta una serie de ventajas significativas para la industria. ¿Quieres conocerlas? En el siguiente artículo, desde Campos, entramos en detalle. 

Qué es y cómo se consigue el autoconsumo industrial 

Como veníamos diciendo, la energía eléctrica que se consume en el sector industrial es muy elevada, lo que hace que las empresas y pymes industriales busquen la manera de lograr un ahorro energético significativo.

El autoconsumo fotovoltaico industrial surge como respuesta a esta necesidad, caracterizándose por ser un modelo de consumo energético que permite a las industrias y empresas del sector generar su propia energía solar para el propio autoconsumo de la empresa. 

En cuanto a su funcionamiento, el autoconsumo industrial se enfoca principalmente en la consecución de energía fotovoltaica mediante la instalación de placas solares. Este proceso conlleva instalar paneles, normalmente en las cubiertas que se encuentran en el tejado de la nave industrial, con el objetivo de generar energía eléctrica, lo que supone un consiguiente ahorro en la factura de la luz.

Es importante saber que, según la instalación de estas placas solares puede variar en función de la tipología de la cubierta. De esta forma, es necesario hacer un estudio de la instalación para poder encontrar la solución que más se adapte a la industria.

En cuanto a sus ventajas, además de la generación interna de energía y el evidente ahorro energético que esto conlleva, de manera general, el autoconsumo industrial implica también una reducción de la dependencia energética externa, lo que les permite evitar los posibles aumentos de los precios de la energía. 

Por otro lado, el uso de la energía renovable generada mediante los paneles fotovoltaicos implica una reducción de la huella de carbono de la empresa y una contribución notable a la sostenibilidad ambiental; un aspecto muy valorado en el marco empresarial actualmente. 

Además, en algunos casos, cuando la generación de energía excede el consumo, este exceso puede ser vertido a la red eléctrica, lo que podría generar ingresos adicionales o créditos energéticos. O, por el contrario, el autoconsumo industrial también permite que, con el objetivo de maximizar la utilidad de la energía generada, las empresas puedan implementar sistemas de almacenamiento de energía con el fin de acumular el exceso y utilizarlo cuando sea necesario. 

Marco legal y regulaciones del autoconsumo industrial 

Como es evidente, el autoconsumo industrial requiere de una regulación que garantice su buen uso. De esta forma, es importante saber que las instalaciones de autoconsumo industrial están reguladas, por un lado, por el Real Decreto Ley 15/2018, de 5 de octubre, de medidas urgentes para la transición energética y la protección de las personas consumidoras, con el objetivo de que los consumidores, productores, y la sociedad en su conjunto, puedan beneficiarse de las ventajas que puede acarrear esta actividad, en términos de menores necesidades de red, mayor independencia energética y menores emisiones de gases de efecto invernadero.

Por otro lado, mediante el Real Decreto 244/2019, de 5 de abril, se regulan las condiciones administrativas, técnicas y económicas del autoconsumo industrial de energía eléctrica, contemplando requisitos como que la conexión se realice a través de un cuadro de mando e incluya las protecciones diferenciales tipo A necesarias para garantizar que la tensión de contacto no resulte peligrosa para las personas.

Tecnologías y sistemas de autoconsumo industrial

En cuanto a las tecnologías y sistemas de autoconsumo industrial, antes de realizar una instalación, en cualquier caso, es necesario llevar a cabo un estudio previo para adaptar el autoconsumo energético a las necesidades de la industria, teniendo en cuentas sus particulares concretas, así como su geolocalización.

De manera general, los sistemas de autoconsumo más utilizados corresponden a las placas fotovoltaicas para industria; unos elementos que, como todos sabemos, convierten la radiación solar en electricidad mediante el efecto fotovoltaico. El funcionamiento de las placas fotovoltaicas para industria se basa en la capacidad de ciertos materiales semiconductores para liberar electrones cuando son impactados por fotones de luz solar. Así, estos electrones liberados generan una corriente eléctrica que puede ser capturada y utilizada como energía. 

En cuanto a la instalación que requieren los sistemas de autoconsumo industrial, sus partes se pueden dividir en:

• Instalación de paneles solares: encargados de transformar la energía solar en energía eléctrica. En su instalación se deben considerar aspectos como la ubicación y el espacio disponible, la orientación e inclinación, la capacidad de generación de energía o los sistemas de almacenamiento de la misma.
• Activación de inversores; etapa crítica para poner en funcionamiento la generación de energía. Los inversores corresponden a elementos encargados de transformar la energía continua proveniente de los paneles solares en energía alterna.
• Conexión con la red eléctrica existente de la industria: paso fundamental en la implementación del autoconsumo industrial.
• Medición y monitorización del sistema; esencial para asegurar su correcto funcionamiento, eficiencia y para llevar un seguimiento de la producción de energía.

Cómo conseguir un autoconsumo industrial: 5 ventajas clave

Debido a las múltiples ventajas que presenta, en las que entraremos en detalle más adelante, el autoconsumo industrial es una estrategia cada vez más popular en todas aquellas empresas que desean reducir sus costes energéticos, impulsar su sostenibilidad y contribuir a la transición hacia fuentes de energía más limpias. 

Como hemos comentado, el autoconsumo industrial consiste en generar parte o la totalidad de la energía que se necesita para operar una instalación industrial utilizando fuentes renovables, como la energía solar, eólica o de otro tipo. 

A medida que las industrias se enfrentan a desafíos como los aumentos en los precios de la energía convencional y las crecientes preocupaciones por el cambio climático, la adopción de prácticas energéticas más responsables se vuelve crucial. En este sentido, el autoconsumo industrial emerge como una solución versátil que abarca desde pequeñas y medianas empresas hasta grandes instalaciones fabriles.

Entre las 5 ventajas más destacadas del autoconsumo industrial podríamos diferenciar: 

Influencia en las cuentas de la empresa, al verse un ahorro del 70% aproximadamente en la factura de la luz

La implementación de sistemas de autoconsumo industrial, como la energía solar, no sólo ofrece una alternativa energética más limpia, sino que también puede generar un ahorro sustancial en las cuentas de la empresa, llegando a alcanzar aproximadamente un 70% en la factura de luz. Esta reducción drástica de costes no sólo influye en los resultados financieros a corto plazo, sino que también abre la puerta a una mayor competitividad y resiliencia empresarial en el futuro.

Aprovechamiento del espacio, al instalar los paneles fotovoltaicos en las cubiertas

La instalación de paneles fotovoltaicos en las cubiertas no sólo se trata de generar energía, sino de transformar los espacios en activos energéticos productivos. Esta tendencia, además de impulsar la eficiencia operativa, fortalece la posición de la empresa en un futuro energético más limpio y sostenible.

Compromiso de la empresa con el medio ambiente

En un contexto en el que la conciencia ambiental está en constante crecimiento, el papel de las empresas en la protección y preservación del medio ambiente ha cobrado una importancia sin precedentes. Más allá de la búsqueda de beneficios financieros, cada vez son más las organizaciones que están demostrando un compromiso genuino con prácticas empresariales sostenibles y responsables, como lo es la apuesta por un autoconsumo industrial.

Escaso mantenimiento, ya que los componentes esenciales para la instalación de autoconsumo apenas requieren de especial atención

Con el paso de los años, los sistemas de autoconsumo industrial han ganado una gran popularidad no sólo por su contribución a la sostenibilidad, sino también por su capacidad de requerir un mantenimiento mínimo gracias, en parte, a la gran resistencia y calidad de los paneles solares instalados.

Viabilidad económica

Con el objetivo de fomentar un consumo energético cada vez más sostenible, algunos ayuntamientos y comunidades ofrecen subvenciones y ayudas fiscales a las empresas con el objetivo de impulsar las instalaciones de autoconsumo industrial. 

Además de estas ventajas, el autoconsumo industrial también juega un papel clave en la reducción de emisiones de CO2, en el aprovechamiento del recurso solar en España, y en impulsar un ahorro energético y económico en las empresas del sector, siendo una instalación que consigue una plena amortización entre los 5 y 7 años. 

En Campos, como una empresa que apuesta por las instalaciones de energía eficientes y rentables, contamos con una amplia experiencia en el trabajo de diferentes instalaciones de autoconsumo industrial. Así, nuestros proyectos desarrollados han incluido tanto el diseño como la instalación, siendo la potencia total instalada de 1,2MWp en los últimos meses.

Por su parte, los emplazamientos en los que se han ejecutado estos proyectos son muy variados. Centrándonos en el sector industrial, Campos ha trabajado con diferentes centros de datos, adaptándose a su tipología de la actividad, su infraestructura y las diferentes necesidades energéticas del cliente.

A través de nuestra área de energía, en Campos llevamos más de 15 años ejecutando proyectos de energías renovables tanto a nivel nacional como internacional. A lo largo de todos estos años, hemos sido capaces de adaptar nuestros servicios a las necesidades actuales de la sociedad, llevando a cabo tanto grandes parques solares hasta pequeñas instalaciones fotovoltaicas. A día de hoy, debido a la alta demanda de autoconsumo, y a la evolución de las nuevas tecnologías, continuamos trabajando en el desarrollo e innovación de instalaciones de autoconsumo industrial con el objetivo de ofrecer un servicio de calidad a nuestros clientes. 

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